CONCEPTOS AFINES A LA ACTIVIDAD DE LOBBYING

27 11 2011

En países democráticos el conocimiento de asociación es la madre de todas las otras formas de conocimiento; de su progreso depende el de todos los otros.” Alexis de Tocqueville

Cuando hablamos de grupos de presión y lobbying, existen algunas figuras afines a estos términos, que debemos comprender y no equivocar. Como los grass root, los Caucus, los consultores políticos, los think tank o los Political Action Comité. Pero ¿en qué se diferencian? ¿tienen los mismos objetivos?

Si realizamos un análisis conceptual comparativo, entenderemos que hablamos de asuntos muy diferentes. En el artículo de hoy, intentaremos comprender cada uno de estos términos, y  las diferencias que encontramos con la actividad del lobby.

Empezaremos con los Grassroots, la traducción literal del inglés significaría algo así como «raíces del césped», entendible como «de raíz», «auténtico» o «con base social». En definitiva es una forma de asociación, constituido por los miembros de una comunidad. Implica que la creación del movimiento y el apoyo del grupo sea de forma natural y espontánea, destacando las diferencias con comunidades promovidas por las estructuras de poder. Podríamos definirlos como cualquier organización de activistas provenidos de la base social. Si el movimiento no fuera natural o espontáneo, aunque tenga apariencia de ello, hablaríamos de su opuesto, el Astroturfing («astroturf» es una firma de césped artificial).

Los caucus servirían para denominar a los grupos informales de senadores y congersistas en defensa de unos intereses concretos.

En los EEUU y en Suiza  se entiende por caucus (traducido como «asamblea partidista») como el sistema de elegir delegados en varios estados  de la unión (Iowa, Necada, Wyoming, entre otros), la etapa primaria o preliminar en la que cada partido decide quién recibirá la nominación de su partido a la presidencia.

Cada partido político reúne a la gente que apoya a los diferentes candidatos de cada partido oficial. En esta reunión, el número de delegados se asigna dependiendo de la cantidad de gente que hay en el distrito electoral; hay una fórmula matemática que determina el número de votos que hay que lograr en el caucus, los delegados son elegidos por representación proporcional. Se diferencia de la «primaria» que es más parecida a una elección tradicional.

Computados los resultados de las votaciones en los estados, queda nominado por cada partido el candidato a la presidencia. El presidente resultará de las elecciones finales, a las que se presenta el candidato de cada partido.

Una de las salidas que más auge está teniendo en el ámbito de la política es la de la consultoría. Cada vez son más los políticos que deciden rodearse de asesores externos que les aconsejen en diversas materias.

El consultor político tiene su campo de trabajo habitual en los partidos políticos, los candidatos y los gobiernos. Además, trabajan para aquellas empresas que quieren relacionarse con la Administración Pública (no confundir ni con comunicación institucional, ni con lobbying), ayudando en sus relaciones institucionales. «Tiene que saber de comunicación, de ciencias políticas, algo de derecho, algo de sociología», explica Daniel Ureña.

A menudo se relaciona a los think tank con los lobbies, cuando en realidad sus objetivos y su forma de actuar no etán en la misma línea. Los think tank, es uno de los términos que más podemos confundir con el asunto de lobby.

Los think tank serían isntituciones que generan pensamiento y promueven el debate y la reflexión a través de diferentes vías como la elaboración de informes, docmentos, ect. que hacen llegar a las instituciones a modo de recomendaciones. Proponen y sugieren ideas que puedan ayudar en la toma de decisiones de las esferas políticas. El fin último de este tipo de instituciones consiste en ayudar a mejorar una sociedad y por tanto, la vida de todos los ciudadanos.

Por el contrario, el lobby tiene intereses concretos, que van  más alla del beneficio de una sociedad, ya que se mueven para conseguir unos intereses personales o empresariales.

Por último, si intentamos definir a los Political Action Comité, podríamos decir que son «los grupos encargados de recaudar dinero para apoya a la denominación o la elección de una o varias personas a una función púclica federal o de un estado» (Rubio Núñez, 2003), es decir, que serían todas las organizaciones privadas, que se encargan de financiar algunos asuntos políticos, de interés privado.

Como conclusión, debemos decir que los profesionales de la comunicación tienen el reto de conocer todos estos términos, los cuales definen a diferentes grupos sociales activistas en la vida política, muy relacionados con la actividad del lobbying, pero que poseen carácteristicas, objetivos y funciones muy diferenciadas, para no caer en el error de confundir los unos con los otros. Y obtener una compresión total del entramado estrucutral social-político al que nos enfrentamos cada día.

JGabrielFdz